Ruta de 16 días por Sri Lanka.

Hablar de nuestra ruta de 16 días por Sri Lanka es hablar de naturaleza, de aromas, té, paisajes y, sobre todo de gentileza. Cada una de estas palabras que hemos escrito nos trae un recuerdo imborrable de un país que siempre estará en nuestros corazones y marcó nuestras vidas, porque en una montaña sobresaliente de una inmensa llanura, Manolo “hincó” rodilla y pidió matrimonio a Irene.

Pedida de mano.
Pedida de mano.

Es cierto que Sri Lanka no posee grandes monumentos que destaquen a nivel mundial, pero todo lo compensa con bellos lugares, naturaleza, grandes experiencias y una gente maravillosa (y no es un topicazo). Por estas razones en este post os intentaremos dar motivos suficientes para que este bello país esté en vuestra lista de próximos destinos, en cuanto podamos volver a viajar con normalidad.

Primera razón. Su fauna.

Sri Lanka gracias a su clima tropical posee grandes selvas, palmerales, manglares y una naturaleza de un verde brillante que cubre todo el país. Esta omnipresente naturaleza ha dado lugar a que vivan grandes animales en la isla, destacando el elefante, siendo Sri Lanka el país de Asia donde más concentración de estos animales existen. También hay que destacar que la mayoría de los elefantes en Sri Lanka carecen de grandes colmillos de marfil, por lo que la caza para la obtención de este material no ha tenido tanto impacto en la especie como en otros países. Se calcula que menos de un 10% de elefantes machos tienen colmillos.

Otro de los grandes animales que están presentes en la isla son los leopardos, aunque no tuvimos la ocasión de verlos en nuestra ruta de 16 días por Sri Lanka. Los leopardos de Sri Lanka son los más grande del planeta, llegando incluso algunos a pesar 100 kilos. Cocodrilos, monos, bufalos, ciervos, varanos, pavos reales, el gallo de Ceilán y preciosas aves (se cree que existen mas de 150 especies de aves), serán otros animales que encontrarás en esta isla. Esta variedad de fauna se debe a que, en algún momento del pasado, estuvo conectada por tierra a India, lo que favoreció esta gran migración de animales.

Por esta gran riqueza en fauna recomendamos hacer uno o varios safaris en este país. Los safaris pueden variar de precio y las entradas a los parques suelen ser caras, pero merecen la pena. El Parque Nacional por excelencia del país es el de Yala (al sur de la Isla), ya que aquí se encuentra la mayor concentración de leopardos y se pueden divisar otros animales con facilidad. Su precio es de 60€ (2 pax) en un jeep compartido con 6 personas. Hay numerosas agencias que organizan estos safaris. Nosotros lo gestionamos en nuestro hotel (River Front, cercano al parque de Yala).

Familia de elefantes en el Parque de Yala. que vimos en nuestra ruta de 16 días por Sri Lanka.
Familia de elefantes en el Parque de Yala.

Pero nuestro parque favorito en nuestra ruta de 16 días por Sri Lanka fue el de Minneriya, por la escasa presencia de turistas y porque disfrutamos de varias familias de elefantes para nosotros solos. Su precio fue más alto, de unos 80€ pero en esta ocasión el jeep era para nosotros solos. Aquí pudimos observar manadas de elefantes, ciervos, zorros y jabalíes. Fuimos al amanecer y es el momento ideal para visitarlo, ya que aún no hace excesiva calor y los animales están muy activos.

Elefantes cortando el camino.
Elefantes cortando el camino.
Safari privado.
Safari privado.

Respecto a la fauna marina también existen grandes atractivos, como tortugas marinas. Hay actividades para conocer la vida de estos animales. Pero nosotros fuimos a una para observar el desobe de las tortugas y no lo recomendamos. Las pobres estaban rodeadas de turistas y todos con sus móviles y cámaras. No creemos que se respetara el momento del animal. No somos animalistas, pero adoramos la naturaleza y esta actividad no respetaba a los animales. Nos fuimos nada más percatamos como era la actividad y la cantidad de personas que había. La realizamos en la localidad de Tangalle, de la que ya os hablaremos más adelante.

Pero el destino quiso premiarnos, y en las playas de Polhena Beach nos encontramos varias tortugas gigantes en la misma orilla. Nunca habiamos visto unas tan grandes y con total tranquilidad. Nos extrañó ver que no era una actividad turística preparada, las tortugas estaban allí tranquilas… ¡Y los turistas alucinábamos!

Tortuga en la playa de Polhena.
Tortuga en la playa de Polhena.

Por último se pueden avistar delfines y ballenas de varios tipos pero no hicimos ninguno de estos tours en nuestra ruta de 16 días por Sri Lanka. Estas actividades se organizan desde Mirissa o Galle.

Segunda razón. Conducir tu propio tuk-tuk.

Sí, existen empresas que ofrecen la oportunidad de alquilar vuestro propio tuk-tuk, y de esta forma recorrimos el país durante nuestra ruta de 16 días por Sri Lanka. Nosotros lo alquilamos en la ciudad de Negombo con la empresa PICK & GO TRAVELS por unos 250$ y 150$ de fianza. Respeto al trato de la empresa fue genial. También necesitarás obtener el Carnet de Conducir Internacional que es un documento que se obtiene en DGT pagando unas tasa de 10,95 euros y aportando dos fotos.

Recogida del tuk-tuk.

Esta experiencia ha sido de la más divertidas a la hora de recorrer un país, siendo una forma original y diferente de desplazarte por tus propios medios, ¿y qué sentido tiene viajar si no hay aventura?.

Pese a las dudas de este medio de transporte o de la seguridad vial en un lugar tan diferente, nuestra experiencia fue genial. No tuvimos ningún problema (solo un pequeño golpe al aparcar que se solventó por 4€)

A diferencia de India, las condiciones de seguridad vial en Sri Lanka, son aceptables, las carreteras suelen estar en buen estado y el tráfico no resultó caótico ni peligroso, por norma general. Al revés, cuando los paisanos se percataban de que un occidental era el que conducía les resultaba algo simpático y siempre te intentaban saludar o se mostraban amables. Eso sí, con los autobuses hay que tener precaución y van como locos.

Nosotros este viaje lo realizamos en 2017 y pueden ser que las cosas hayan cambiado y haya más occidentales que opten por esta forma de viaje y se haya extendido más, pero desde luego que provocaba bastante sorpresa en los lugareños. Tampoco fuimos los primeros, ya que esta idea se nos ocurrio leyendo distintos blogs.

¿Cómo conducir un tu- tuk? El funcionamiento es similar a una moto vespa de marchas. En el puño derecho se encuentra el cambio de marchas, así como el embrague. El puño izquierdo es el acelerador y el freno es un pedal. También en la parte derecha hay una palanca que deberás mover para efectuar la marcha atrás. Eso sí, SE OS CALARA UN MILLÓN DE VECES AL ARRANCARLO, pero es parte del conducción con este vehículo. Tened en cuenta también que un tu- tuk no alcanza mucha velocidad (no pasaréis de los 70 km/hora), por lo que debéis medir bien el tiempo y las distancias.

Y tras unas breves clases para que Manolo se soltara y le cogiera el truco a eso de ser tutuero, estabamos recorriendo Sri Lanka en nuestro propio tuk-tuk, con nuestras dos mochilas, el móvil y un altavoz con música alta para subir aún más la adrenalina.

Primeras horas de conducción
Primeras horas de conducción

Tercera razón. Sus monumentos milenarios

Aunque Sri Lanka no destaque en el panorama internacional por sus monumentos, no hay que infravalorarlos. El budismo Thevarada tiene una gran influencia y huella en el país dejando grandes estupas, ciudades históricas, increibles estatuas y originales formaciones.

La mayoría de este páis es budista y no hinduista, como podrías pensar, compartiendo la misma rama de la religión budista que otros paises del Sudeste Asiático como Tailandia o Camboya.

Sri Lanka cuenta con 8 monumentos en la lista de lugares protegidos y reconocidos por la UNESCO como de interés mundial, destacando sobre todo Sigiriya, Anuradhapura y Polonnaruwa . Estas tres ubicaciones son el denominados “Triángulo Cultural de Sri Lanka», ciudades milenarias que guardan gran parte del interés cultural de este país. Nosotros visitamos Sigiriya y Polonnaruwa, ambos lugares recomendables. También en esta lista de la UNESCO se encuentran la ciudad de Kandy y Galle (está última no os la podéis perder). Aquí os dejamos la lista de los monumentos que visitamos y nuestra particular opinón:

  • Sigiriya siempre tendrá un lugar destacado en nuestros corazones. Fue en el monte Pidurangala, desde donde mejor se puede observar Sigiriya y desde donde se pierde la vista infinitamente entre llanuras y selvas, donde Manolo le pidió matrimonio a Irene. Aunque os parezca increible…¡Irene dijo que no! y es que creía que era una de las bromas de Manolo. Pero tras rectificar rápidamente, seguimos felizmente casados y con mucho mundo por recorrer. Pero volviendo al tema, Sigiriya es un lugar fascinante y que resalta en el paisaje, ya que es una roca enorme, en medio de una llanura. Esta montaña es conocida como “La Roca del León”, y en su superficie se construyó un fortaleza (hoy en día sólo quedan ruinas). Para subir a esta roca pasarás por unas escaleras flanqueadas por dos enormes garras de León, que para nosotros fue lo más interesante del conjunto arquitectónico, ya que sólo quedan restos de una ciudad destruída y algunos frescos inspirados en el harén del Rey, representando a mujeres sensuales e insinuantes. La entrada al recinto tiene un precio de 25€, e incluye el museo.Sabemos que el precio de los monumentos en Sri Lanka es elevado, pero es una forma de colaborar en su mantenimiento y en el desarrollo de la vida local. No hagáis como otros viajeros que vacilan de haberse colado en monumentos en Sri Lanka porque eran caros y después tienen para pagar su billete de avión. Pero como os comentamos, las mejores vistas de Sigiriya son desde el monte Pidurangala, justo al lado, y su precio es de tan solo 3€. La subida es algo complicada y os recomendamos llevar agua y calzado cómodo. En la subida encontrarás alguna sorpresa en forma de escultura y tendrás que utilizar tu instinto de alpinista, pero merecerá mucho la pena. En total serán veinte minutos de subida para llegar a un lugar increible.
  • El Templo de Oro y Cueva de Dambulla. Este lugar se encuentra en la cuidad del mismo nombre y si vais desde Colombo o Negombo a Sigiriya, pasaréis por este lugar. El Templo de Oro está coronado por un inmenso Buda Dorado y en su recinto se encuentran varias cuevas milenarias, destacando cinco de ellas que guardan pinturas, estructuras y esculturas de Buda, destacando una increible de Buda tumbado (de unos 14 metros). Las pinturas están realizadas en la pared de la propia cueva, por lo que guardan un valor añadido. Para acceder a ella hay que subir bastantes escalones, ya que se encuentra en la cima de una montaña (por ello también es denominado Rock Temple). Esta subida estará amenizada por macacos, así que cuidado con ellos que algunos gastan bastante genio. El precio de las Cuevas y el Templo fueron unos 4€.
  • También dirección Negombo-Sigiriya, y poniendo rumbo Anuradhapura (ciudad que no pudimos visitar), se encuentra la Estatua de Avukana. Es una enorme silueta de Buda sobre una flor de loto que resulta bastante atractiva. La estatua tiene 12 metros de altura, tallada en la piedra en el siglo V y, que según cuenta la leyenda, fue el resultado de una competición entre maestro y alumno (la otra estatua está ubicada en Sasseruwa). Nos asombraron mucho los detalles, ya que la túnica que envuelve la silueta está muy detallada y el trabajo de los artesanos tuvo que ser enorme para sacar esa figura de un bloque de roca al que se encuentra unido. La entrada al recinto fueron unos 4€.
  • La Ciudad de Polonnaruwa. Las ciudad fue capital de la Antigua Sri Lanka entre los Siglos XI y XIII y cuenta con varios edificios destruidos, esculturas y varias estupas o pagodas (en Sri Lanka son denominadas Dagobas o Viharas), que dan lugar a imaginar como tuvo que ser aquella ciudad. Su extensión es bastante grande, así que recomendamos dar prioridad a la zona del Cuadrángulo que es donde se encuentra los restos del Palacio Real. El conjunto total cuenta con numerosos edificios religiosos y civiles, así como 4 grandes Budas tallados en la pared. Uno de ellos está tumbado y de una longitud de 15 metros, es considerado la figura más perfecta de Buda tallada en Sri Lanka (Gal Vihara). La entrada en total fueron 23€ aprox (incluyendo el museo). Nosotros no visitamos el recinto entero ya que es inmenso y no alquilamos bicicletas, así que os recomendamos que lo hagáis y su precio será como mucho de 2,50 ó 3€.
  • Otro lugar interesante que visitamos en nuestra ruta de 16 días por Sri Lanka fue el templo hinduista de Matale. Se sitúa entre Sigiriya y Kandi y no tiene nada que nos haga suponer que es una parada obligatoria, pero cuenta con un templo hinduista de lo más llamativo y colorido, que a nosotros nos encantó. El templo se llama Sri Muthumani Amman Kovil y es un templo de gran altura, de manera escalonada, con una recargada decoración y llamativas figuras inspiradas en la deidades indias. El templo se merece una visita, echarse mil fotos en él y creerás estar en la propia India (que conste Sri Lanka, particularmente, nos gustó más). Para entrar tendrás que hacer un donativo (al menos cuando nosotros estuvimos).
  • Kandi no nos resultó muy atractivo, aunque entra como recomendación en muchas guías de viajes. Es cierto que tiene edificios interesantes, un jardin botánico precioso o monumentos que ver, como el templo de Sri Dalada Maligawa, donde se guarda una de las reliquias más importante para los budistas, el diente de Buda (concretamente el canino izquierdo de 2.5 cm). Su precio son unos 9€. Pero, particularmente, la ciudad no nos llenó. Quizás pudiera ser por su horrible tráfico. También es un lugar de referencia para los viajeros que quieran recorrer Sri Lanka en tren, una opción interesante y que te hará disfrutar de unos paisajes increibles.
  • Ya de camino al sur, dirección a la costa o el Parque Nacional de Yala, nos encontramos con un lugar que no lo teníamos apuntado pero es lo bueno de viajar por tus propios medios, tener libertad de movimientos y horarios. En este transcurso dimos con las figuras de Buduruwala, un lugar donde nos encontramos solos, un lugar que no te explicas el por qué pero tenía una espiritualidad especial. Se respiraba calma, paz, tranquilidad, y ante nosotros unas enormes figuras esculpidas en la roca que llevaban siglos contemplando el paisaje. En esta ocasión a dos “guiris” que se dejaron caer por allí y encontraron un lugar espiritual, sin saber bien la razón, como en pocas ocasiones lo habían hecho. El lugar es idílico entre sombra de árboles, naturaleza y el canto de las aves, además de un lago cercano. Las figuras son concretamente 7, de las cuales la mayor mide 16 metros. Se calcula que fueron construidas en el Siglo IX d.C, y el lugar fue un refugio de monjes. El precio de la entrada rondaría los 2€.
  • Y como última recomendación de lugares culturales, ciudades o monumentos que visitar, tenéis que apuntar la ciudad de Galle. Situada en la costa sur, el fuerte del centro de la ciudad tiene un ambiente colonial, que sobresale respecto a las demás ciudades del país. Su centro es tranquilo y en él, hay muestra de ese pasado colonial y la multiculturalidad de Sri Lanka. Declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, por la ciudad pasaron portugueses, holandeses y británicos, que dejaron sus distintas huellas en ella. Los portugueses fueron los primeros en cosntruir el fuerte, los holandeses le dieron la estructura que perdura hasta nuestros días, y los británicos reformaron la planta de la ciudad, creando una ciudad que evoca un pasado comercial. Como símbolo de esta situación estratégica de nudo comercial y logístico, perdura su faro construido por los holandeses. Si recorres la fortaleza, no te olvides ver el atardecer en el Bastión de Trión. Pero Galle no es sólo historia. Sus calles son ideales para pasear tranquilamente, realizar algunas comprillas, buscar un alojamiento en sus numerosos hoteles-boutiques o villas en algunas de sus antigua casas coloniales, o pegarte el mejor capricho gastronómico que te puedas pegar en el país. Concretamente debéis apuntar el Restaurante Spoon´s, el mejor lugar donde comimos en Sri Lanka, y en nuestra lista de restaurantes TOP por el mundo. Una delicia probar sus arroces cocinados en leche de coco, con langostinos picantes. Una delicia.
Vista de Sigiriya desde Pidurulanga.
Vista de Sigiriya desde Pidurulanga.
Cueva de Dambulla.
Cueva de Dambulla.
Estatua de Avukana
Estatua de Avukana.
La Ciudad de Polonnaruwa.
La Ciudad de Polonnaruwa.
Templo de  Sri Muthumani Amman Kovil
Templo de Sri Muthumani Amman Kovil
 las figuras de Buduruwala
Las figuras de Buduruwala
Faro en Galle
Faro en Galle

Cuarta razón. Sus preciosos paisajes y su costa.

Como ya hemos mencionado anteriormente, Sri Lanka es un país verde y precioso, con una naturaleza incipiente y donde a cada momentos te encontrarás en un lugar propio de paraíso idílico como hicimos nosotros en nuestra ruta de 16 días por Sri Lanka.

Las conocidas Tierras Altas del Té situadas en el centro de la isla, deben de ser una parada obligatoria. En este lugar, en medio de una isla del Índico, los británicos encontraron el lugar adecuado para plantar colinas y colinas de esta planta que tan deliciosas hojas nos ofrece.

Aunque el destrozo para la naturaleza fue bestial, ya que se desforestaron miles de hectáreas de selva, el cultivo de té ha dado a Sri Lanka un reconocido título a nivel mundial como productor de esta hierba y es motor fundamental de su economía, siendo fuente de trabajo para miles de familias. Las lluvias, las horas de calor justas y un clima moderado, son las condiciones idóneas para que entre estas colinas se cultiven distintos tipos de té con gran prestigio, constituyendo un paisaje hermoso y de infinito verde.

Campos de té.
Campos de té.

En el centro de Sri Lanka y gracias a su orografiía montañosa, también se dibuja uno de nuestros monumentos naturales favoritos, las cascadas. Ramboda Falls es una de esas casacadas que no os podéis perder. Increible caída de agua donde te puedes pegar un chapuzón de lo más refrescante, pero con gran afluencia de público. También merece una visitar las cascadas de Rawana.

Ramboda Falls
Ramboda Falls

Si eres amante del trekking o simplemente quieres disfrutar de una caminata por la naturalez y gozar de los paisajes de Sri Lanka, te recomendamos subir al Ella Rock, una montaña desde donde podrás tener unas panorámicas increibles y que mezclará en la ruta pequeñas dósis de esencias de Sri Lanka, como su tren, sus campos de té o el verde intenso que lo cubre todo. No os explicaremos como subir, ya que hay numerosos blogs muy bien desarrollados de como abarcar esta experiencia. Sólo os diremos que os atreváis.

Os llevará un par de horas y no hay que echar mucha cuenta a los lugareños, ya que se ofreceran como guías y os terminaran reliando y perdiendo para ganarse una buena propina.

Vista desde Ella Rock
Vista desde Ella Rock
Camino hasta la cima
Camino hasta la cima

Respecto a sus costas, nosotros quedamos enamorados en nuestra ruta de 16 días por Sri Lankade la costa de Tangalle (localidad que mencionamos anteriormente). Tangalle Beach son cientos de metros de arena dorada fina y unos palmerales increibles, barcas en la arena y, sobre todo, soledad. Tendréis la playa para vosotros solos. Inconvenientes, las corrientes son muy fuertes y hay que tener cuidado si eres de los que te gusta nadar. Por la tarde también es habitual que lleguen pescadores y allí mismo se forme un pequeño mercado local para vender las capturas del día.

Playa de Tangalle
Playa de Tangalle

Más playas dignas de mención son las de Mirissa, en concreto la Secret Beach. Esta pequeña playa es idónea para realizar snorkel. En la carretera paralela a la costa que une Matala con Mirissa podréis observar a los pescadores zancudos, pero en muchos casos es sólo una atracción turística donde os pedirán dinero.

Una localidad costera reseñable es Unawatuna, cerca de Galle. Su Jungle Beach es un rincón precioso y con un snorkel aceptable, así como con una pagoda cercana ideal para ver el atardecer, llamada Japanese Peace Pagoda. La localidad en sí está demasiada masificada para nuestro gusto y su ambiente no nos llamó la atención. Eso sí, encontramos un hotel que lo compensó todo. Ya os lo diremos más tarde.

Japanese Peace Pagoda
Japanese Peace Pagoda

Otras localidades dignas de una parada son Bentota o Hikkaduna, encontrándose en ellas árboles ideales para tomar esas fotos con palmeras tumbadas que tanto gusta al estilo caribeño.

Playa de Bentota.
Playa de Bentota.

Quinta razón. Su gente.

Aunque pueda parecer un topicazo, la gente de Sri Lanka nos resultó especialmente amable y honesta. Nunca nos habían pasado anécdotas como que nos devolvieran dinero por haber comido muy poco en una cena en un hotel (Riverside Lal Homestay), o que una mujer se recorriera todo un mercado para devolvernos unos 20 céntimos porque se habia confundido en el cambio.

Otra anécdota similar en nuestra ruta de 16 días por Sri Lanka nos ocurrió en un alojamiento. Un señor nos preguntó de donde éramos y contestamos de España y de la ciudad de Sevilla. El hombre al día siguiente nos preparó un desayuno con mermelada de “naranjas amargas de Sevilla”. No sabemos de donde sacó eso a tantos kilómetros de casa, pero acabamos probándolas aún no gustándonos la mermelada.

Desayuno con roti, zumo natural y tortilla
Desayuno con roti, zumo natural y tortilla

No vimos maldad en Sri Lnaka. Siempre dejábamos las mochilas en el tuk-tuk, sin ninguna medida de seguridad y nunca nos faltó nada. Incluso una vez se nos olvidó durante más de dos horas el móvil en el tuk-tuk (un Iphone 7 nuevo y reluciente) y cuando nos acordamos de él, allí estaba, donde lo dejamos. Puede ser casualidad o no, pero llevamos 33 países recorridos y los detalles que allí nos pasaron con la gente, nos dejaron marcados y como uno de nuestros mejores recuerdos de la vieja Ceilán.

Nuestros alojamientos

Fue un viaje donde los alojamientos no los llevábamos reservados, todo fue improvisado y en el único que pillamos con antelación fue un desastre. Nuestras recomendaciones y alojamientos donde repetiríamos son los siguientes:

  • Riverside Lal Homestay. MUY RECOMENBLE. Es un alojamiento familiar, ideal para visitar Sigiriya. Limpio y a un precio muy correcto para los viajeros con un presupuesto ajustado (unos 10€ con desayuno incluido). Podéis concretar realizar la cena allí con ellos. Dispone de una supuesta piscina natural, que más bien es un pequeño riachuelo. Manolo se bañó en él pero Irene no se atrevió.
  • Hotel River Front. RECOMENDABLE. Un hotel cómodo y funcional, cercano al Parque Nacional de Yala y gestiona sus visitas. Su precio aproximado fue 20 € la noche. Dispone de piscina.
  • Green Hill Paradise. MUY RECOEMNDABLE. Si os queréis dar un capricho en el viaje y sois de presupuesto ajustado, este hotel nos gustó mucho relación calidad-precio. Fue nuestro mejor alojamiento en nuestra ruta de 16 días por Sri Lanka. Está cercano a Uwatuna, dispone de una piscina infinity y la casera era una checa muy simpática. Nosotros negociamos el precio in situ, y nos salió por 38€, con desayuno.
  • Luca´s Memorial. RECOMENDABLE. Su nombre se debe a que su dueño es un artista y se dedicaba a realizar pinturas y retratos y lo expone allí mismo. También tiene piscina y cerca un manglar que se puede recorrer en barco. Fue una buena estancia.
  • Unawatuna hostel. DESASTROSO. Teníamos reservadas dos noches aquí y sólo pasamos la primera porque no pudimos encontrar otra cosa mejor. Sucio/asqueroso, lleno de perros callejeros y personal desagradable. Una experiencia nefasta. El manglar que tiene justo al lado lo usan como vertedero y te venden que es un alojamiento concienciado con el medio ambiente. Los huéspedes y personal daban síntomas de estar drogados.

Datos a tener en cuenta y precios.

Si ya habéis llegado hasta aquí esperemos que sea porque estáis motivados para visitar este precioso país. Os dejaremos algunos datos que os pueden interesar.

Los precios de la comida son muy bajos, y habitualmente no superaréis los 10 € por persona/día. Pueden ser variables pero un plato de noodles no os debe salir por más de 2€. Es habitual los bares estilo buffet.

Su comida no es muy destacable, tiene cierto parecido a la hindú pero no es tan sabrosa ni variada. Auque cuenta con mucha variedades de arroz siempre lo mezclan con lo mismo, utilizando mucho el curry. El kottu es su plato más destacable que consiste en verduras troceadas con trozos de pollo y como no, el curry.

Plato de kottu
Plato de kottu

Como snack rápido, venden samosas (empanadas fritas rellenas de carnes o verduras). Es habitual que las venda un pequeño cochecillo por las calles con música típica de carrito de los helados.

El roti también es habitual. Y como postre la cuajada. Sí, en este país es típica la cuajada que las encontraréis en tarro de barro y a la venta a pie de carretera. Respecto al pescado, lo disponen al papillote cocinado sobre brasas. Y fruta toda la que queráis, barata y riquisima, destacando sus sabrosos mangos.

Pescado a la brasa.
Pescado a la brasa.

Bebidas como el té o el café cuestan en torno a 1€. Para la cerveza tendrás que buscar los Wine Shops. En ellos una Lion Lager (la cerveza local), te costará 1€ la lata grande. En cambio en los bares te podrá costar hasta 3€.

Cerveza Lyon e un restaurante buffet.
Cerveza Lyon en un restaurante buffet.

Otros datos generales

Sri Lanka es una isla situada en el Golfo de Bengala, a 32 kilómetros al sur de la costa India. Por esta razón la isla es llamada en ocasiones como la “Lágrima de la India”, y su forma tambien ayuda a este apelativo. Hasta 1972 su nombre oficial fue Ceilán, nombre dado por los portugueses, y con el que aún se identifica a este país.

Esta cercanía a India ha hecho que entre los dos países existan importantes vínculos culturales, étnicos, religiosos, comerciales y económicos. Pero a diferencia de India la mayoria de la población es budista y no hinduista. Aunque también existen comunidades hinduistas, cristianos y musulmanes.

La situación política actual es estable, aunque recordemos el atentado sufrido en el país en 2018 contra una iglesia y reinvidicado por un grupo yihadista. El terrorismo es una lacra que afecta al mundo entero en cualquier lugar. También hay recordar que este país sufrio un tremendo conflicto hasta 2009 entre gobierno y una guerrilla de la minoría Tamil, que fue especialmente cruento al norte de la isla. Como siempre echad un vistazo a la pagina del Ministerio de Exteriores antes de iniciar un viaje.

Sri Lanka tiene un clima tropical, con una media de temperaturas de 28ºC. Las mejores épocas para viajar es en temporada seca, que abarca de diciembre a marzo (nosotros lo hicimos en enero). Octubre y noviembre son los meses más lluviosos, por lo que mejor será evitarlos.

Como siempre, hay que visitar el área de Sanidad Exterior de vuestra provincia, para confirmar si es necesaria alguna vacuna para viajar a este destino. En el momento de nosotros realizar el viaje, no era necesaria ninguna. Por supuesto echad protección contra los mosquitos y un pequeño botiquín donde no falten medicamentos habituales y reguladores gástricos.

Bueno, y hasta aquí este extenso post de Sri Lanka, en el que realizándolo hemos disfrutado mucho recordando anécdotas y recuerdos imborrables que haran de nuestra ruta de 16 días por Sri Lanka un país grabado en nuestros corazones viajeros. Esperemos que os haya motivado para visitarlo y como siempre, no dudeis en plantearnos alguna cuestión en nuestro correo y compartirnos si os gustó¡¡¡.Nos vemos por el Mundo!!!

Atención, elefantes
Atención, elefantes

¡Ah! Si os quedásteis con más ganas de Asia, os dejamos aquí nuestro link directo para que podáis echar un vistazo a este maravilloso continente.

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